Sabemos que las mamás hacen milagros todos los días. Pero hay un detalle que muchas veces pasa desapercibido: los medicamentos de uso diario pueden estar mal administrados sin que lo sepan.
Y es aquí donde comienza nuestra historia. Lo que parece inofensivo, como un analgésico o una vitamina, puede terminar jugando en contra si no se usa correctamente.
En este artículo te explicamos todo lo que deberías saber sobre los medicamentos comunes, con ejemplos simples y sin enredos. Si eres mamá, o cuidas a una, esto te interesa.
Medicamentos de uso diario
Muchas personas tienen algún medicamento que toman de vez en cuando. Algunas mamás los consumen casi a diario. Los más comunes son:
- Analgésicos (acetaminofén, ibuprofeno)
- Antiácidos
- Vitaminas y suplementos
- Antigripales
- Laxantes
- Antialérgicos
- Pastillas para dormir
La pregunta no es si los usan, sino si los están usando bien.
1. «Como es de venta libre, no pasa nada» ❌
Muchos piensan que si un medicamento se vende sin receta, es 100% seguro. Pero no es así.
Ejemplo:
El ibuprofeno puede causar problemas estomacales si se toma sin alimento. También puede subir la presión arterial.
Recomendación: respeta las dosis y, si lo necesitas por más de 3 días, consulta con tu médico.
2. Las vitaminas no siempre suman
Tomar vitaminas sin necesidad puede ser inútil o incluso riesgoso.
Sabías que:
- El exceso de vitamina A puede afectar el hígado.
- Las vitaminas A, D, E y K se acumulan si se abusa de ellas.
Recomendación: úsalas solo si hay deficiencia confirmada o indicación médica.
3. Medicamentos y alimentos: combinaciones que fallan
Algunos alimentos pueden interferir con los medicamentos.
Ejemplos:
- El calcio interfiere con la absorción de hierro.
- Antiácidos pueden reducir el efecto de fármacos para la presión.
Consejo: lee la etiqueta o consulta si debes tomarlos con o sin comida.
4. No todos los dolores se calman con pastillas
Usar analgésicos sin saber qué los causa puede ocultar un problema mayor.
Ejemplo: dolores de cabeza frecuentes podrían ser estrés, mala postura o algo hormonal.
Recomendación: si algo duele seguido, no lo ignores.
5. El cuerpo cambia con los años
A medida que envejecemos, procesamos distinto los medicamentos.
Esto significa:
- Puede que necesites otra dosis.
- Algo que antes era seguro, ahora puede no serlo.
Revisión anual: habla con tu médico si tomas varios fármacos.
6. Automedicarse parece rápido, pero es un riesgo
Tomar lo mismo que a otra persona le funcionó no es buena idea.
Evita:
- Usar recetas viejas
- Tomar medicamentos sobrantes
- Mezclar remedios sin orientación
Consulta siempre.
7. Lee las etiquetas
Muchas personas no leen bien la forma de uso, contraindicaciones o advertencias.
Ojo con:
- Dosis por edad o peso
- Frecuencia
- Efectos secundarios
Saber lo que tomas es parte de cuidarte.
El rol de Farmanorte: tu aliado en el bienestar diario
En Farmanorte no solo vendemos productos. También orientamos para que tomes decisiones informadas.
Te ayudamos a:
- Entender etiquetas
- Organizar tus medicamentos
- Saber cuándo consultar al médico